Diaconisa Seondeok Yang (52 años), Zona 12, Iglesia Central Manmin.

El 6 de mayo del 2017, alrededor de las 7:30 p.m. del sábado, me encontraba de camino a casa a pie. Estaba caminando en la acera junto a una carretera de doble vía. De repente, un camión que venía en frente, cruzó la línea central y vino hacia mí. Estaba sorprendida. Cuando el camión llegó justo donde yo estaba me apresuré a golpearlo y a gritar. Sin embargo, parecía que el conductor no podía escucharme.

Finalmente terminé siendo atropellada por el camión y caí al suelo. En ese momento, pude ver una situación asombrosa. Un ángel fuerte, un poco más alto que el camión, estiró sus dos brazos para detener el camión. Desde atrás, las alas estaban dobladas. El ángel me cubrió con una cortina transparente. Se sentía como un escudo protector.

Pronto fui encontrada por un coche patrulla y me trasladaron al hospital en una ambulancia, pero no tuve ningún problema en absoluto y ahora no tengo efectos secundarios. Yo había escuchado tales testimonios en la iglesia, pero esta situación produjo mucha fe ya que pude ver y experimentar el mundo espiritual. Doy todas las gracias y la gloria a Dios quien me protegió a través del ángel.