Mientras que algunas veces se ora individualmente, deben reunirse a menudo con personas y orar clamando en acuerdo sobre lo que se pide. Estudiemos lo que es la oración en acuerdo y cómo hacerla. Al ofrecer esta oración, experimentemos el poder de la oración de acuerdo.


¿Qué es la oración en acuerdo?

En Mateo 18:19 leemos: «Otra vez os digo, que si dos de vosotros se pusieren de acuerdo en la tierra acerca de cualquiera cosa que pidieren, les será hecho por mi Padre que está en los cielos». Esto indica cuánto Dios se complace con la oración hecha por dos que se pusieren de acuerdo acerca de algo que pueden pedir.

Aquí, el «dos que se pusieren de acuerdo» en la oración se refiere a la oración ofrecida por cada persona en unidad con el Espíritu Santo cuando oran a Dios en el nombre de nuestro Señor (Judas 1:20). En otras palabras, deben orar con sus corazones unidos cada vez más con el corazón del Espíritu Santo. Solo en esa oración puede obrar el Señor, y la oración es poderosa para hacer descender rápidamente respuestas de parte de Dios.

Con el fin de ofrecer esta oración, primero debemos alcanzar el corazón del espíritu. En la medida en la que los rasgos de falsedad, el pecado y el mal son removidos de nuestro corazón, podemos alcanzar más el corazón del espíritu y comprender la voluntad de Dios claramente a través de la voz y el llamado del Espíritu Santo.

Mientras obedecemos al Espíritu Santo, recibimos más de Su plenitud e inspiración y nos volvemos más unánimes con él. Si oramos en unidad con Él, ni los pensamientos carnales, ni la codicia interferirán con la oración.

Por lo tanto, lograrán orar con los deseos del Espíritu Santo y en la verdad para que las cosas se hagan a la manera de Dios. Incluso cuando se está cansado, se podrá recibir rápidamente la llenura del Espíritu, se alejará la fatiga, y se comunicará profundamente con Dios. Este tipo de oración se refiere espiritualmente a la oración de acuerdo.


¿Cómo podemos orar de acuerdo con el Espíritu?

Dios se complace cuando oramos en acuerdo con el Espíritu Santo y responde con gran bendición. Es porque la oración es ofrecida en unidad con el Espíritu Santo. A través de esa oración de acuerdo, podrán recibir las respuestas de parte de Dios y dar testimonio del Dios vivo.

Podrán orar de acuerdo con el Espíritu Santo al recibir Su llenura (Efesios 6:18). El Espíritu Santo es el corazón de Dios y escudriña todas las cosas, aun lo profundo de Dios (1 Corintios 2:10). Él intercede por los santos conforme a la voluntad de Dios (Romanos 8:27). Así, cuando oran siguiendo la guía del Espíritu Santo, pueden orar conforme a la voluntad de Dios y Él contestará sus oraciones y cumplirá los deseos de su corazón.

Si usted es un principiante o no ha orado constantemente, puede resultarle difícil orar de acuerdo con el Espíritu Santo. Si usted ora con sus pensamientos y en su propia manera, podría no recibir la llenura del Espíritu. Usted puede tener pensamientos vanos y quedarse dormido por el cansancio. Su oración puede ser una repetición sin sentido y podría olvidar lo que dijo en oración.

Nadie puede orar perfectamente en acuerdo con el Espíritu Santo desde el principio. Pero, a medida que se esfuerza para orar en el Espíritu, Dios reconocerá su esfuerzo y le dará la gracia. Entonces, usted podrá orar bien y finalmente lo hará en el Espíritu Santo. Dios recuerda incluso las oraciones que ha ofrecido en el pasado y le retribuirá con respuestas y bendiciones.

En Mateo 18:20, Jesús dijo: «Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos». Cuando los hijos de Dios que han aceptado al Señor y recibieron el Espíritu Santo oran juntos, el Señor dirige sus corazones para estar unidos con el Espíritu Santo y unidos unos con otros en oración. Él obrará en esa oración y esta será agradable a Dios.

Si los corazones de las personas no están unidos, el líder debe guiarlos para alabar a plenitud y para que se arrepientan para que pueden estar unidos. Solo cuando oren en unidad pueden recibir la llenura del Espíritu y recibir alegría y convicción por la respuesta.


El poder de la oración en acuerdo

Después de que el Señor resucitado ascendió al cielo, 120 personas se reunieron para recibir al Consolador, el Espíritu Santo, que el Señor había prometido enviar. Cuando oraron en acuerdo, todos ellos recibieron el Espíritu Santo y hablaban en otras lenguas (Hechos 1:12-15; 2:1-4).

Ese día los apóstoles recibieron gran poder, y a través del sermón del apóstol Pedro, tres mil personas fueron bautizadas en el mismo día. El número de creyentes fue añadido por las señales y prodigios manifestados a través de los apóstoles y las vidas de los creyentes fueron renovadas (Hechos 2:14-47).

Por medio de la oración en acuerdo, lograron compartir el mensaje poderosamente, curar a los ciegos y los cojos, resucitar a los muertos, limpiar todo tipo de enfermedades y expulsar a los demonios de la posesión demoníaca.

Si están unidos con el Espíritu Santo, y oran con el corazón, el Dios todopoderoso trabajará trascendiendo sus mayores expectativas sin importar en qué tipo de situación estén (Hechos 12). Para extender el reino de Dios, los pastores, los obreros y los creyentes deben orar en acuerdo. Y, dependiendo de cuánto ponen su corazón y su devoción en la oración, la obra del Espíritu Santo será diferente.

La oración de acuerdo es la base de las bendiciones para el crecimiento espiritual o el cumplimiento de los deseos del corazón (Eclesiastés 4:9-12). Cada oración individual puede ser ofrecida como pilar de fino aroma y puede carecer de la capacidad para destruir el campamento del enemigo diablo y Satanás en el aire, pero cuando la oración se añade al espeso aroma de la oración, es mucho más potente. En la oración en acuerdo, la oración de cada uno será ofrecida como aroma espeso y subirá poderosamente al cielo.

Al orar por el reino de Dios en unidad con el Espíritu Santo, Dios se deleitará con la oración, y dará la respuesta a los deseos del corazón personales, incluso más rápido.

El número de personas no es lo más importante en la oración de acuerdo. Las personas que se reúnen deben recibir la misma exhortación del Espíritu Santo y orar con el mismo propósito. Por lo tanto, en el centro de la oración de acuerdo está el Espíritu Santo. Solo cuando las personas están unidas siguiendo la guía del Espíritu Santo en la oración, se puede decir que es la oración en acuerdo.