~ Rev. Seok-Kyu Lee (Asistente Principal, Escuela Dominical Manmin)

En Mayo del 2003, yo estaba en mi séptimo año de ministerio. Después de ver una y otra vez como los libros escritos sobre el cielo y el infierno tenían un profundo impacto sobre las personas, busqué a lo ancho y largo por materiales publicados en relación a estos reinos espirituales. Después de leer un gran número de libros sobre el cielo y el infierno, estaba impactado al encontrar que varios pastores y trabajadores de las iglesias podrían terminar en el infierno. Yo deseaba investigar más profundamente así que busque información sobre "cielo" e "infierno" en el Internet y llegué a la página Web de la Iglesia Manmin Central.

Escuchando los mensajes de santificación

Los mensajes del Dr. Jaerock Lee en el sitio Web de la iglesia trajeron a mi vida una estruendosa impresión espiritual y me conmovieron profundamente. También llegué a comprender muchos asuntos espirituales a través de los "Sermones sobre el Génesis" y aprendí específicamente sobre los diferentes niveles del cielo y la horrorosa naturaleza del infierno. Los mensajes sembraron semillas de fe verdadera y, al permitirme santificar mi corazón, me enseñaron una y otra vez a avanzar como la novia adecuada para saludar al Señor a Su regreso. También me ayudaron a convencerme de que Manmin era la congregación que despertaría a la gente en todos los lugares con el evangelio de la santificación.
Le pedí también a mi esposa que escuchara los mensajes, y después de escucharlos, mi esposa, quien había estado orando para que yo encontrara un mentor espiritual, se regocijó con la respuesta de Dios a su oración.
Durante todo el mes de Diciembre del 2003, yo aparté 40 días para un tiempo de ayuno mientras continuaba escuchando los mensajes sobre el Génesis, y fui profundamente motivado por éstos.

Presenciando las obras del poder de Dios

Asistiendo a "La 12ª Reunión especial de dos semanas de avivamiento con el Dr. Jaerock Lee", pude ver de cerca al Dr. Lee y reunirme con la congregación de Manmin.
Había en realidad dos factores que me preocupaban en mi ministerio. Uno, la transformación del rebaño se tardaba en llegar y dos, como un pastor mi ministerio no estaba basado en el poder de Dios. Jesús predicó el evangelio mientras manifestaba obras poderosas para que las personas pudieran creer en Él; pero en nuestro tiempo no es fácil encontrar esa clase de ministerio. Habiendo recibido sanidad de empiema cuando me encontraba en la escuela media, yo tenía fe en las obras de sanidad recopiladas en la Biblia. Por esa razón, deseaba dirigir un ministerio basado en el poder de Dios así como los apóstoles en el libro de los "Hechos", pero me encontraba demasiado apartado de la realidad.
Sin embargo, en la Iglesia Manmin Central pude ver no solamente las obras del poder de Dios sino también la luz brillando en los miembros de Manmin. Transformados por el evangelio de la santificación, hermanos y hermanas laicos estaban tan bien capacitados como los pastores y ministros.

La sanidad de mi hija de dermatitis atópica por medio de la oración del Pastor General.

Nosotros empezamos a asistir a la vigilia de los Viernes en Marzo del 2006 y experimentamos de primera mano el poder de Dios tal como fue manifestado a través del Pastor General en "El retiro de verano de toda la iglesia" en Agosto de ese año.
Nuestra hija mayor Ji-Young había estado sufriendo de dermatitis atópica por años. Cuando ella tenía 7 años de edad, la enfermedad empeoró progresivamente y durante la noche, Ji-Young se rascaba hasta que su cuerpo sangraba y supuraba mientras dormía. Durante los meses del verano, mi esposa y yo teníamos que atar sus manos para que no se rascara.
Al final, Ji-Young decía que sería sanada por fe. Entonces la enfermedad, sobre la cual todos habíamos estado orando, desapareció completamente en el "Retiro de Verano de toda la iglesia" cuando el Pastor General oró por los enfermos desde el altar.
Como yo escuchaba el evangelio de santidad, trataba de compartir los mensajes con otros aún cuando pertenecieran a diferentes denominaciones y les hablaba de la fe verdadera. A diferencia de los miembros de Manmin, quienes escuchan con regularidad el mensaje de la verdad y experimentan las obras del poder de Dios y llegan entonces a poseer una fe verdadera; hay muchos otros creyentes que profesan su fe en Dios pero no han experimentado o presenciado las obras de Su poder y no poseen una fe verdadera. Por encima de eso, después de convencerse de que solamente el evangelio de la santidad podría alertar a los pastores y ministros en los últimos tiempos, yo quería compartirlo con ellos también.

Asistente principal de la Escuela Bíblica en medio de Su consejo

Sin embargo, Dios deseaba que yo sirviera en Manmin. Una noche, mi esposa tuvo un sueño en el cual toda mi familia estaba esperando para reunirse con el Pastor General y él nos dijo, "Sin importar cuan ocupado esté, yo oraré por ustedes muchachos". Mi esposa también vio al Pastor General en una visión en la cual le dijo, "Yo ayudaré. Vengan conmigo". Yo también tuve muchos diálogos de fe en mis sueños con el Pastor General.
Luego el 25 de Febrero del 2007, mi familia y yo nos unimos oficialmente a la Iglesia Manmin Central y participamos en "La reunión especial de oración de siete semanas" empezando en Marzo. Mientras oraba, me di cuenta que al trabajar con el ministerio Manmin alcanzaría más rápidamente mi visión de decirle al mundo sobre el cielo y el infierno. De hecho, la Iglesia Manmin Central ha estado advirtiendo a las almas con mensajes sobre el cielo y el infierno durante 25 años.
Yo deseaba ser parte del ministerio del Pastor General y a inicios de Septiembre del 2007, recibí su oración y fui transferido al Seminario Teológico Unido de Santidad como un estudiante adelantado. Obteniendo información invaluable y materiales de los profesores y compañeros, experimenté el evangelio de la santidad a gran profundidad y me preparé yo mismo con una vasija. En Noviembre, Dios me asignó una preciosa posición como Asistente Principal de la Escuela Dominical Manmin.
Le doy todo el agradecimiento y gloria a Dios Padre por guiarme a la Iglesia Manmin Central que batalla para guiar hasta la última alma hacia la Nueva Jerusalén, el mejor de todos los lugares celestiales, y por hacerme comprender que solamente la santidad es Su agradable voluntad. ¡Aleluya!