Shohei Nakano (Iglesia Manmin de Osaka. Primer año de secundaria, Iglesia Manmin de Osaka, Japón)

En febrero del 2007, cuando estaba en el quinto año de escuela primaria, mi estrés mental llegó a su límite debido a la instrucción extra y a la cantidad de tareas. Como consecuencia, los síntomas de la dermatitis atópica que normalmente tenía se fueron empeorando. De una constante picazón pasó a que todo mi cuerpo estuviera bañado en sangre y supurando pus.

Con picazón alrededor de mis ojos, me rascaba tanto al punto que perdí mis cejas. Esto duró 2 años y tres meses. Me avergoncé de mi apariencia e incluso evitaba reuniones con las personas.

Mientras estaba en la escuela primaria, podía cubrir mi frente con el flequillo largo. Pero las cosas fueron diferentes cuando entré a la secundaria, porque como un código de vestuario, tuve que tener pelo corto.

El Pastor Marco Kim (Iglesia Manmin de Osaka) y su esposa, la Pastora Changmi Lee, estaban muy al tanto de mi problema. Por lo que fervientemente oraron por la sanidad de mi dermatitis atópica. Y constantemente me hablaban acerca de otros testimonios de sanidad de los miembros y sembraban fe en mi corazón.

Fue un día en el pasado mes de junio, que alguien al lado de mi clase me ridiculizó por mis cejas. Regresé a mi casa con el corazón roto. Ya que mi madre me vio deprimido, me preguntó: "¿Te pasó algo en el colegio?"

"Alguien del colegio me ridiculizó por no tener cejas"
Mi madre me dijo que deberíamos dar gracias y orar juntos, ya que Dios dice: "Dad gracias en todo momento". Aunque no podía aceptar esto en mi corazón, obedecí e hice una confesión de fe. Yo dije: "Gracias", y luego una vez más dije levantando mi voz: "Te doy gracias por el muchacho que se burló de mi".

Luego de dos semanas la picazón desapareció y un tercio de mi ceja izquierda volvió a crecer. La Pastora Chagmi Lee oró por mí con el pañuelo de poder (Hechos 19:11-12) cuantas veces pudo. Mientras pasaba el tiempo, me ceja derecha también comenzó a crecer. ¡En 3 semanas creció tanto pelo que mis cejas estuvieron oscuras y con pelo! Esta experiencia me dio una fe grande, y ahora estoy llevando una vida fervorosa de fe gracias al amor de Dios.